..........

Bueno, luego de un fin de semana bien carreteado parece que recien estoy despertando porque sali el jueves, viernes y sabado hasta altas horas de la madrugada, fue tanto que toda la semana no he podido quedarme dormida antes de las 2:00 am si es que no más.

Hace unos días presencié un incendio que afectaba directamente a nuestra familia y fue raro sentir que en cualquier minuto nos puede pasar cualquier cosa, que hay acontecimientos que no estan en nuestras manos impedir, hay cosas que no podemos manipular. Afortunadamente no sucedio nada grave y fue muy poco lo que se perdio, de echo creo que me dejo más ganancias de orden espiritual.

Pude observar muchos sentimientos:
Vi como corria una persona tremendamente afligida hacia el lugar del incendio cuando no tenia nada que hacer ahi porque vivia como a una cuadra del lugar, creo que no habia razón para que tuviera la cara deformada que tenia, es como diria mi abuela, una persona "de mal vivir", a mi personalmente no me cae muy bien porque siempre le dice cosas a las mujeres cuando pasan.

La cantidad de gente que habia era impresionante, entonces ahi uno ve como la curiosidad es mas fuerte que muchas otras cosas, todos atónitos mirando como si no tuvieran nada mejor que hacer a las 9:00 am.

Yo aprendí a apreciar el trabajo de los bomberos y vi como la gente se desespera viendo que a sus ojos no hacen nada, claro porque es su casa y estan afligidos lo que los hace no ver el esfuerzo de estos trabajadores voluntarios.

Por otro lado lo que si me afligió fue ver a mi padre alterado, sin pensarlo fui hasta donde estaba él y lo saque de ahí porque estaba muy cerca pense que podria estar interrumpiendo a los bomberos porque les gritaba de no muy buena forma. En el minuto que hago esto, de ir por mi padre para sacarlo de ahí, siento y veo la mirada de varios de los que ahí estaban, miradas que quedaron dando vuelta dentro de mi, sentí que lo que nadie pudo hacer lo estaba haciendo yo, un ser pequeño y delicado al lado de la potencia que tiene mi padre, porque el es alto, enérgico e imponente.
Vi la tranquilidad que me ha dado la vida y sentí el gran cariño que siento por mi familia, llego toda la familia, los nietos, los hijos, las nueras y los yernos, no habia nadie que de alguna u otra forma no estuviera.

Muchas veces criticamos a nuestros familiares pero en estas circunstancias vemos como todos se unen frente a una situación dificil para uno de ellos y ya no importa si uno es flojo o el otro es pesado, creo que esto, este espiritu de familia tenemos que saber llevarlo a la nuestra cuando la tengamos, ese es un valor que debe ser traspasado de generación a generación.